En un partido angustioso que no se acababa nunca, España metió un gol, el gol que nos hizo llevarnos a casa el trofeo de oro y malaquita. La copa que viaja en primera clase.
Louis Vuitton, como no podía ser de otra forma, se encargó de diseñar y elaborar, a mano, la funda que trasladaba el trofeo más esperado, el más deseado.
Nuestros jugadores ya están en Madrid y las calles se visten de rojo... y amarillo.
Loewe llena sus escaparates de globos.
Stonefly en Gran Vía recibe a la selección colgando banderas!
Monday, July 12, 2010
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¿Se habrá vuelto futbolera esta bloguera...?
ReplyDeletejajaja
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